Destaca que "la educación sigue su curso en este país, es más, esa enseñanza pública que reiteradamente han acusado al Gobierno y al Partido Popular de querer desmantelar ha visto incrementado su número de alumnos en estos tres años".
El Grupo Parlamentario Popular, a través de sus portavoces de Educación, Sandra Moneo, y Universidades, María Jesús Moro, subrayó hoy su defensa de "un principio fundamental como es la libertad de enseñanza" y reclamó "debates serios y rigurosos" sobre la educación en nuestro país.
Así se expresaron durante la comparecencia de la secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades en la Comisión de Educación, donde Moneo destacó que el Grupo Popular "no va a permitir que se cuestione un principio fundamental como es la defensa de la libertad de enseñanza porque cuatro golfos hayan intentado enriquecerse a costa de la buena voluntad y confianza de las familias en el sistema educativo".
"Estamos defendiendo la libertad de enseñanza, el derecho de las familias a elegir colegio y la posibilidad de las administraciones educativas de poner a disposición de las familias los centros y la oferta más variada". "Si pretenden cuestionar el principio de libertad de enseñanza, nos tendrán enfrente", subrayó.
Para la portavoz popular, es "extremadamente frustrante" comprobar que los grupos de la oposición continúan enrocados en las mismas posiciones: "están donde estaban hace tres años, desde el no por el no que hemos visto en sesiones continuas, hasta la supuesta llegada del apocalipsis en el sistema educativo". "Después de estos tres años, la comunidad educativa merece algo más que la escasa aportación que algunos grupos parlamentarios hacen en una materia tan importante como es la educación", aseguró Moneo.
En este sentido, destacó que "la educación sigue su curso en este país, es más, esa enseñanza pública que reiteradamente han acusado al Gobierno y al Partido Popular de querer desmantelar ha visto incrementado su número de alumnos en estos tres años". "Casi el 70% de los alumnos españoles cursan sus estudios en centros públicos y lo hacen gracias a un principio que el PP ha defendido hasta la saciedad: la libertad y la calidad".
Para Moneo, en este hecho puede tener algo que ver que "por fin se ha abordado un debate serio sobre la calidad de la enseñanza, sobre el reconocimiento de la autoridad del profesorado, o que los padres perciben que pueden tener la mejor educación para sus hijos, con independencia de dónde vivan o el centro al que acudan, y que son libres para elegir la formación religiosa y moral de sus hijos, tal y como establece la propia Constitución, porque por fin se ha expulsado el adoctrinamiento de las aulas".
Por ello, reclamó a los partidos de la oposición que "no se enzarcen en planteamientos ridículos que ponen en evidencia sus propias contradicciones".
La universidad no se puede encerrar en 140 caracteres
Asimismo, la portavoz de Universidades del Grupo Popular, Mª Jesús Moro, destacó que "el Congreso tiene que tener debates serios y rigurosos; cuando se extrapola el debate universitario a tertulias con titulares de 140 caracteres se hace un flaco favor al trabajo hecho durante siglos en el sistema universitario español".
"La universidad no se puede encerrar en 140 caracteres; cuando se intenta hacer demagogia con titulares, todo es después muy complicado", aseveró.
En su opinión, "es evidente que el sistema universitario español tiene deficiencias, como tantos otros, y que hay que trabajar para mejorar las deficiencias". "Es evidente que hemos pasado por una situación de crisis económica que no tiene precedentes y que indudablemente se resiente todo aquello que necesita financiación para funcionar, aunque no tenga que funcionar mejor porque tenga más financiación", explicó.
Así, recordó que todos los informes serios y rigurosos coinciden en que "en determinadas cuestiones en las que debe mejorar el sistema universitario es necesaria una financiación suficiente y que determinados modelos de financiación deben cambiarse; dado el Estado que nos hemos dado en la Constitución, para ello deben intervenir las Comunidades Autónomas, las Universidades y también el Estado".
Para ello, explicó, "debe procederse a una planificación en la que se vayan incorporando hitos determinantes para que estas cuestiones puedan mejorarse, pero no podemos olvidar que la marcha atrás se produce cada vez que una de las partes en este puzzle no cumple con sus obligaciones y algunas universidades no han cumplido, como ha puesto de manifiesto recientemente el Tribunal de Cuentas, y eso ensombrece el trabajo hecho por otras universidades".
La portavoz popular también reclamó que no se aprovechen los debates para decir cosas que luego no dice el Gobierno o las medidas que propone. "Hace poco debatíamos el Decreto de Grados o de Ordenación Académica y yo decía entonces que el debate estaba centrado en lo que no dice el Decreto: no obliga, no va contra la autonomía universitaria, no establece la obligatoriedad de 3+2, no establece una minoración de la calidad de los grados y no lleva a que todos los grados tengan que tener tres años", recordó. "Todas esas cosas que denuncia la oposición no las dice el decreto y, por tanto, estamos en el debate de la confusión"
Finalmente, Moro pidió "que cada uno dentro de sus competencias cumpla con sus deberes de transparencia, de responsabilidad y de simplificación normativa". "Creo que esa labor es importante, sin titulares, en beneficio de un sistema universitario que sin duda va a dar mucho que hablar a España en positivo y queremos terminar la legislatura en positivo, porque lo necesitamos, lo necesitan las universidades y lo necesitan nuestros investigadores", concluyó.